Una chica de 23 años se entera de que espera un bebé durante el sexto mes de embarazo.
Puede que sea un punto de partida más que reconocible por todos pero, sin embargo, Ninjababy convierte este argumento en una película divertida, ágil, insólita e imaginativa.
Abraza el caos, lo convierte en genialidad y consigue una de las cosas más complicadas: el equilibrio perfecto entre humor y emotividad.
Una excelente película que rechaza sin pudor el discurso oficial sobre el instinto maternal. Feminismo sin necesidad de enarbolar ninguna bandera.
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