Hay gente que celebra mundiales, bodas, divorcios, despedidas, treintenas, nacimientos, aniversarios, primeros besos y últimos suspiros. Nosotros, (in) comprendidos voluntarios, celebramos que formamos parte de un cine.
No os queremos engañar, muchos caen por el camino. Muchos lo intentan y no lo consiguen. Muchos se quedan sin fuerzas y ceden ante los cantos de sirena de la normalidad. Otros, sin embargo, sin saber cómo ni porqué continuamos y lo hacemos hasta que nos damos cuenta de que ha llegado ESE momento en el que estamos perdidos, ese momento en el que ya no hay vuelta atrás, ese momento en el que el virus del cine ya nos campa a sus anchas y lo hace riéndose de nuestras defensas que están tumbadas al sol, embelesadas con la idea de formar parte de la familia del CineCiutat.
Nos empeñamos en llamarnos voluntarios pero, en realidad, somos trabajadores de los que llevan el amor y el arte por bandera, de los que multiplican las horas de la jornada y dividen las del sueño, de los que saben que por rápido que corran, bien que se escondan o lejos que se vayan, siempre habrá una parte de nosotros que será voluntaria de nuestro cine.
Gracias al nuevo modelo organizativo de CineCiutat, los voluntarios trabajamos a través de círculos, algunos permanentes y otros temporales.
Los permanentes, como el círculo de programación (voluntarios que ayudan a confeccionar la cartelera semana a semana), el círculo de educativas (voluntarias que gestionan las sesiones escolares, los talleres y CineCiutat Nins) o el círculo de comunicación (voluntarios que gestionan las redes sociales, las noticias de la web o las fichas de las películas) nos acompañan desde el nacimiento del proyecto.
Personas comprometidas y trabajadoras que ayudan a que este proyecto siga caminando.
Sin embargo, hay unos círculos para cometidos puntuales, por ejemplo, un círculo para proyectar una película, un ciclo o para organizar la fiesta de aniversario que, al finalizar el evento, se disuelve.
Personas que, al igual que las anteriores, nos necesarias para la supervivencia del proyecto.
Si crees que tu tiempo, tus ideas y tus ganas tienen algo que decir en alguno de los círculos, que seguro que sí, te animamos a enviar un correo a contacte@cineciutat.org y contarnos que fantásticas locuras tienes en la cabeza.